Seguros de vida, de accidentes personales o de trabajo: en qué se diferencian y cuándo contratarlos
Brindan un respaldo económico ante situaciones imprevistas. En qué consiste cada uno.
En el día a día las personas están expuestas a diversas situaciones y hasta posibles accidentes que pueden afectar la seguridad y el bienestar, tanto a nivel personal como en el ámbito laboral. En este sentido, contar con un respaldo económico se vuelve fundamental para hacer frente a eventualidades y protegerse.
Los seguros de vida, los de accidentes personales y los seguros de riesgos de trabajo, son los tres tipos de cobertura más relevantes que brindan resguardo financiero en distintas circunstancias.
Si bien cada uno de ellos tiene características particulares, es fundamental comprender sus diferencias y en qué casos es recomendable contratarlos.
¿Qué es un seguro?
Es un instrumento financiero que ayuda a reducir la incertidumbre económica sobre el futuro. En términos concretos, el interesado en cierta cobertura firma un contrato (póliza) con una compañía de seguros en el cual se compromete a pagar una determinada cantidad de dinero (prima) con el fin de garantizar cierto pago futuro en el caso de que ocurra alguna de las circunstancias por la cuales está asegurado (siniestro).
El contrato de seguro es consensual, por lo que los derechos y obligaciones son recíprocos, tanto por parte de la aseguradora como de quien se asegura. Hay diferentes tipos de seguros, con diversas opciones de coberturas para cada necesidad y presupuesto.
Tanto los seguros de vida como los de accidentes personales y riesgos del trabajo son productos que buscan brindar protección y tranquilidad al que los contrata.
Seguros de vida
El objetivo principal del seguro de vida es brindar seguridad financiera a la familia y a aquellos que dependen de los ingresos del asegurado en caso de fallecimiento o enfermedad invalidante. Esta cobertura puede incluir también beneficios adicionales, como la protección por incapacidad total y permanente, renta diaria por internación, trasplantes y enfermedades terminales.
Tanto las pólizas individuales como las colectivas ofrecen la posibilidad de adaptarse a las necesidades y posibilidades económicas de cada cliente.
En el caso de los empleadores, tienen la obligación de contratar el Seguro Colectivo de Vida Obligatorio (SCVO), cuyo costo y suma asegurada están establecidos por el decreto 1567/74 y sus actualizaciones. Además, dependiendo de la actividad de la empresa, se deben contratar seguros específicos, como el Seguro de Vida Obligatorio para Actividades Rurales o el Convenio Mercantil.
De acuerdo con la Ley 20.744 de Contrato de Trabajo, los empleadores deben abonar una indemnización a sus empleados ante su fallecimiento o incapacidad total y permanente. En caso de fallecimiento la indemnización es de medio sueldo por cada año trabajado, pasando a un sueldo por año de trabajo cuando la indemnización es por incapacidad.
“Es importante tener en cuenta que al contratar estos seguros no solo se cumple con una obligación legal, sino que también se brinda protección a los trabajadores y sus familias en caso de eventualidades”, señaló el Director Comercial de National Brokers, Juan Rui.
Accidentes personales
Los seguros de accidentes personales son una herramienta de protección que brindan tranquilidad y seguridad a las personas en caso de sufrir un accidente inesperado.
Estas pólizas, tanto individuales como colectivas, no son de carácter obligatorio pero ofrecen una amplia cobertura que incluye indemnización por muerte e invalidez permanente, reintegros y asistencia médico-farmacéutica o asistencia prestacional.
La prima y las sumas aseguradas se establecen según las necesidades del cliente, la actividad que realiza y el nivel de riesgo al que está expuesto. Esta flexibilidad permite adaptar la cobertura a las circunstancias particulares de cada persona.
Además, estas pólizas pueden contratarse por períodos cortos, como por ejemplo 72 horas, para un trabajador que realiza reparaciones en un domicilio. También pueden ser pólizas anuales.
Si bien cualquier persona entre 18 y 64 años puede contratar un seguro de accidentes personales, estas coberturas son especialmente útiles para trabajadores independientes o cooperativas, ya que estas personas, al no estar en relación de dependencia, no están cubiertas bajo la ley de Riesgos del Trabajo.
“El seguro de accidentes personales garantiza la tranquilidad económica del asegurado y su familia en situaciones difíciles. Es una forma de protegerse ante eventualidades que puedan afectar su capacidad laboral”, comentó Juan Rui.
¿Para qué sirve un seguro de accidentes personales y a quién beneficia?
Es una herramienta que sirve a cualquier persona mayor de 18 años , siempre y cuando no tenga condiciones que representen un riesgo de accidente agravado. Además, algunas aseguradoras ofrecen seguros de accidentes personales específicos para deportistas, monotributistas, independientes, freelancers, entre otros.
“Es importante destacar que todas las profesiones o actividades laborales tienen sus propios riesgos. Un jardinero puede enfrentar riesgos diferentes a los de un arquitecto. Por esta razón, las aseguradoras categorizan los riesgos en sus seguros de accidentes personales “, advierte Rui.
Y agrega: “Contratar un seguro de accidentes personales es especialmente recomendado para aquellas personas que realizan trabajos riesgosos y no están cubiertos bajo la ley de riesgos de trabajo.
Los beneficios de estos seguros incluyen:
- prestaciones sanitarias
- renta diaria por internación
- asistencia médica
- traslados por emergencia
- protección económica para el asegurado y su familia
- garantía de calidad de vida para los beneficiarios en caso de siniestros
Existen diferentes tipos de seguros de accidentes personales, que se adaptan a las necesidades específicas de los asegurados. Algunos se centran en brindar protección económica en caso de muerte o accidente, mientras que otros ofrecen cobertura más amplia, que incluye protección ante otros sucesos, accidentes o consecuencias.
accidentes personales
Tanto los seguros de vida como los de accidentes personales tienen como objetivo brindar tranquilidad al asegurado, pero existen diferencias fundamentales entre ellos.
- Cobertura: El seguro de accidentes personales cubre únicamente en caso de un accidente sorpresivo, mientras que el seguro de vida lo hace tanto en accidentes como enfermedades.
- Cálculo de la prima: El seguro de vida toma en cuenta la edad, el sexo, la salud y otros factores, mientras que en el seguro de accidentes personales, la prima se basa en la actividad profesional del asegurado o la cantidad de dinero a asegurar.
- Trabajo: Es común comparar los seguros de accidentes personales con la conocida ART (Aseguradora de Riesgos del Trabajo), pero es importante tener en cuenta que la ART es obligatoria para las empresas con empleados en relación de dependencia. Los seguros de accidentes personales, en cambio, están dirigidos principalmente a trabajadores independientes y freelancers.
Riesgos del Trabajo
El seguro de riesgos del trabajo, también conocido como ART (Aseguradora de Riesgos del Trabajo), es un seguro obligatorio establecido por la Ley 24.557 para los empleadores. Esta cobertura se encarga de proteger a los trabajadores en relación de dependencia en caso de accidentes laborales y enfermedades profesionales.
A diferencia de otros seguros, como los de vida o accidentes personales, el de riesgos del trabajo se centra exclusivamente en el ámbito laboral, durante el desplazamiento desde su domicilio hasta su lugar de trabajo, y viceversa.
En caso de que ocurran accidentes o enfermedades profesionales, el seguro de riesgos de trabajo se encarga de cubrir los daños, desde la rehabilitación del empleado hasta su reinserción laboral.
En resumen, un seguro de vida no cubre los gastos por accidentes, al igual que un seguro de accidentes personales no cubre la muerte por otros motivos que no sean un accidente y la ART no cubre siniestros por fuera del ambiente de laboral o por fuera del trayecto desde y hacia el trabajo. Esto refleja que el que el motivo y el lugar de un accidente son claves.